Ante lo que significa una nueva alza en el pasaje del transantiago a realizarse este día sábado 17 de Julio, los actores sociales y políticos agrupados en la coordinadora por la defensa del transporte como derecho social, señalamos que la situación que se expresa con el actual sistema de transporte público de nuestra capital, se ha vuelto insostenible para la gran mayoría de quienes hacemos uso de este servicio.

El sistema está lejos de ser lo prometido, las frecuencias no se cumplen, los tiempos de viaje se han alargado, el plazo para realizar trasbordos se ha acortado y las aglomeraciones continúan. El sistema tiene problemas en su diseño y no estamos dispuesto a que se nos traspasen los costos en condiciones en las que no se han cumplido los mínimos que justificaban su implementación.

Además de lo anterior, debemos sumar la indignación frente al actual gobierno se ha quedado de brazos cruzados ante este problema y ha decidido explotarlo como una cantera de réditos políticos para golpear a la concertación, sacrificando con ello a los cientos de miles de santiaguinos que hacemos uso diario de este medio de transporte. La concertación tampoco ha querido tomar cartas en el asunto para no asumir errores que le son propios y tenemos a las dos mayores coaliciones políticas delegando sus responsabilidades en un panel de expertos, con lo que eluden el mandato de defender los intereses de la ciudadanía.

Es por todo lo anterior que hoy hacemos un llamado a todos los actores sociales, políticos y a la ciudadanía en general a expresar nuestro rechazo ante esta nueva alza, a no permitir que nos sigan metiendo la mano en nuestro bolsillo y salir por tanto a las calles a expresar nuestro rechazo el día Martes a las 18:00 Hrs en Plaza de Armas.

Marchemos por rechazar el alza y por exigir un sistema de transporte de calidad y con buena cobertura, que esté en manos de todos los chilenos, en cuya gestión participe la comunidad organizada, que tenga tarifas acordes a la capacidad de pago y ofrezca buenas condiciones de trabajo para los conductores.

Que cada organización social, política y cada ciudadano traiga sus banderas, sus distintivos, que llenemos de volantes, carteles y colores el centro de nuestra capital en señal de rechazo ante este sistema fracasado y que no hace más que aumentar su peso sobre nuestros hombros.