Entre el hombre y La Historia Natural Fáctica (es decir, Lo que fue), ha existido una cierta relación de negación. Según Kant el hombre al contemplar la serie de sucesos indeseables que le preceden (como: la guerra, la pobreza, la esclavitud, etc.), existe una respuesta de repulsión o de asco, lo cual nos lleva a desviar la mirada de la historia humana, de nuestra propia historicidad. Es desde esta perspectiva que Kant plantea el Noveno principio del texto “Ideas”, como un hilo conductor, como una PERSPECTIVA CONSOLADORA que nos haga mantener la mirada en la historia, Que mirando LO POSIBLE podamos crear un Proyecto que nos sirva como una Esperanza. Pero aunque Kant propone esto, también admite lo siguiente: “Significaría una falsa interpretación de mi propósito creer que esta idea de una historia universal, que implica en cierto sentido un hilo conductor a priori, pretendo rechazar la elaboración de la historia propiamente dicha, la que se concibe de modo puramente empírico” [1]. Es decir, Kant propone un Proyecto que solamente Guíe la historia, pero que no se totalice y se vuelva inquebrantable, seria absurdo, claramente propone que dicho proyecto se puede modificar, pero como hemos visto en el texto de “¿Que es la Ilustración?” esto será posible siempre en el mundo publico de la razón, de manera racional para el mundo de lectores, debido a lo artificial del Orden Social, de ahí los limites del uso privado de la razón.

Esta problemática pasa, dirá Kant, porque el ser Humano no posee un lugar en la existencia, es un huérfano de los planes del destino, El lugar que ha de ocupar es en el de la creación de aquel lugar, un lugar que jamás será terminado pero que justamente es en aquella construcción donde el hombre encontrara el sentido de la vida. O dicho de otra forma, el hombre habita en su proyecto, en lo posible. Es aquí donde entra la perspectiva consoladora que nos brinda el Hilo conductor, lo que nos ayuda a mantener nuestra mirada en la historia del género humano (Al menos en teoría).

Pienso que Kant estaría de acuerdo conmigo de que esto es un pésimo camino, ya que si al final debido a la monotonía de nuestras vidas, a la enajenación con la historia y una conciencia de dominación que nos mantiene embobecidos, terminamos desviando una vez mas la mirada de nuestro proyecto, no somos parte de el, si no que simplemente lo seguimos y dejamos que este sea construido por unos pocos, nuestra razón se convierte en una RAZÓN PEREZOSA. Pero si seguimos la lógica de Kant no podríamos revelarnos revolucionariamente y cambiar este proyecto radicalmente, si no que debemos de manera racional manifestar nuestras reflexiones desde el mundo de lectores, intentar que nuestras ideas sean escuchadas o leídas por la sociedad y de esta manera comenzar a participar de la construcción de nuestro lugar, volver a mirar hacia la historia del genero humano…

Pero… ¿Es posible combatir, por ejemplo con un libro, el bombardeo constante de los medios de comunicación que producen una conciencia embobecida?, o ¿Acaso debemos recurrir a formas mas creativas para hacer llegara la sociedad nuestras reflexiones?, ¿Nos encontramos en condiciones de tratar de modificar nuestro actual proyecto de manera pacifica y paulatina?...